Aprender a aprender
Diana Cazaux. IBERCIENCIA: Comunidad de Educadores para la Cultura Científica
Nací y vivo en Buenos Aires, capital de la República Argentina y me dedico a la comunicar las ciencias a través de mi profesión que es ser periodista científica, además de ser docente universitaria en las carreras de comunicación y periodismo de tres universidades. También, soy autora de libros como “Historia de la divulgación científica en la Argentina”, “El ADN del periodismo científico: EL reportaje interpretativo”, varias biografías de científicos argentinos y, el más nuevo que acaba de ver la luz a principios de julio de este año, “Historia del periodismo científico en la Argentina”, editado por la Academia Nacional de Periodismo, hecho que me ha llenado de académico orgullo.
Conocí a la Comunidad de Educadores para la Cultura Científica a través de estar en contacto por mi trabajo con la Organización de Estados Iberoamericanos y comencé a ser miembro de ella desde que inició sus actividades de capacitación para docentes de ciencias de jóvenes de 15 a 18 años. Pertenecer al CAEU me ha brindado capacitación para llevar a cabo mi tarea docente con una visión puesta en tratar de adecuar mis propuestas didácticas atendiendo a presentarlas, si bien con rigor científico, también con nuevos recursos que las tornen más atractivas.
La mejor virtud de estos materiales didácticos es que ofrecen numerosas propuestas prácticas para promover la cultura científica y superar las fronteras entre disciplinas basadas en documentos periodísticos de divulgación científica publicados en diarios de tirada masiva. Como mi especialidad es, justamente, el periodismo científico los he usado en la práctica de redacción periodística.
De los siete contenedores de materiales didácticos: Los retos de la salud y la alimentación, Los desafíos ambientales, Las nuevas fronteras de la materia y la energía, La conquista del espacio, El hábitat humano, La sociedad digital y Otros temas de la cultura científica, los que más me han gustado son los que atañen a la salud y he trabajado con mis alumnos el referido a “El drama de las niñas madres” publicado el 28 de octubre del 2013 en el periódico español El Mundo. En esta nota se hace referencia a que cada año dos millones de niñas son madres antes de los quince años en el mundo. Esta afirmación me permitió trabajar el riesgo para la salud de una maternidad tan temprana y hacer hincapié en la importancia de la escolarización hasta los dieciocho años y el acceso a la educación sexual como la mejor manera de conseguir que un embarazo no interrumpa la infancia.
Este tema logró interesar a mi grupo de alumnos, que son 25, hasta el punto de solicitarme más información y organizar la visita de una médica especializada en adolescencia a quien le hicieron una entrevista.
Difundir algunos de los trabajos que realizamos quienes participamos de esta Comunidad a través de su portal de divulgación me parece una excelente manera de retroalimentación.
Los especialistas que forman parte de IBERCIENCIA y, que tienen a su cargo planear y llevar adelante estas actividades, realizan su tarea exitosamente, a mi juicio, por lo que no tengo nuevas acciones para proponer. Tampoco conozco ningún caso en particular en que por llevar a cabo estas acciones algún joven se haya interesado por canalizar su formación hacia carreras científicas, pero no me cabe duda que lo que sí se logra es que se interesen más por leer noticias científicas y libros de divulgación.
Pertenecer a la Comunidad de Educadores para la Cultura Científica permite a los profesores actualizarse en novedosas estrategias de enseñanza-aprendizaje y contribuye a que incursionemos en llevarlas a la práctica. Una manera de aprender a aprender que motiva y moviliza nuestros propios recursos didácticos.
Comunidad de Educadores para la Cultura Científica: Abierto el registro libre
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2 de septiembre de 2014
Esta Comunidad tiene por objetivo el ofrecer el acceso a unos materiales que han sido desarrollados con el doble próposito de servir paraincrementar la cultura científica y las actitudes investigadores de los estudiantes iberoamericanos y el de promover entre ellos vocaciones hacia el seguimiento de estudios superiores en ciencias e ingeniería.
Las altas se producirán a partir de la primera semana de cada mes. El acceso a la comunidad es gratuito.
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